30 de julio de 2010

Estudio histórico clínico de una doble epidemia

Comenzamos hoy la publicación de un pequeño trabajo de investigación llevado a cabo por el médico villaviejense don Dionisio García Alonso en 1897 y que resultó premiado simultáneamente por las Academías de Medicina de Barcelona y Madrid.


ESTUDIO HISTÓRICO-CLÍNICO DE LA DOBLE EPIDEMIA DE SARAMPIÓN Y COQUELUCHE OCURRIDA EN VILLAVIEJA (SALAMANCA) EN EL AÑO DE 1895-96 por Don Dionisio García Alonso, Médico-cirujano titular de Villavieja, Socio del Colegio de Médicos de Salamanca, Redactor de La Regeneración Médica, Académico correspondiente de la Real de Medicina y Cirugía de Barcelona.

OBRA LAUREADA CON EL PEEMIO CALVO MARTIN POR LA REAL ACADEMIA  DE MEDICINA DE MADRID Y CON EL  PREMIO SALVA POR LA  REAL ACADEMIA DE MEDICINA Y CIRUGÍA DE BARCELONA

PRÓLOGO DEL DR. D. JOSÉ LÓPEZ ALONSO, Catedrático de Clínica médica en la Universidad de Salamanca, Médico del Hospital de la Santísima Trinidad, etc;

SALAMANCA, IMPRENTA DE CALATRAVA, a cargo de L. Rodríguez, 1897


CAPÍTULO PRIMERO

GEOGRAFÍA

Villavieja es un pueblo, antigua villa, perteneciente al partido judicial de Vitigudino, provincia de Salamanca, de cuya capital dista unos 66 kilómetros por vía recta y 78 por vía férrea, poseyendo estación de cuarta clase en el ramal de Boadilla á Barca de Alba, sección de los ferrocarriles de Salamanca á la frontera de Portugal, de cuya nación dista 55 kilómetros por vía. férrea y un poco menos por vía recta.

Encuéntrase, aproximadamente, á unos 700 metros sobre el nivel del mar y á los 40", 57', 39" de latitud N., y unos 2º de longitud O. del meridiano de Madrid (No considerando indispensable para el objeto de esta Memoria una exactitud matemática en estos datos, no me he detenido en la resolución de éstos, no muy difíciles, problemas geográficos. Las cifras que consigno las he sacado tomando como término comparativo la situación de Salamanca, que se halla á 814 metros sobre el nivel del mar, y teniendo en cuenta el suave declive que, con ligeras ondulaciones, presenta el terreno desde dicha capital. En cuanto á latitud, consigno la misma, por hallarse probablemente en el mismo paralelo, y la longitud O. del meridiano de Madrid, que para Salamanca es de 1º, 58', 48', la aumento para este pueblo, atendiendo á su situación al O. de aquélla. y la distancia que le separa.).
Su término municipal forma casi un cuadrado, cuyo lado del S. linda con el de dos alquerías, pobladas de monte de encina y roble; el del O. con el de un pueblo descuajado de monte por esta parte; y los lados E. y N. están formados por el río Yeltes, afluente del Duero, que le separa de los términos de otros dos pueblos, cuajados de abundante monte de añosas y corpulentas encinas.

El Yeltes, cuya menor distancia del pueblo al N. es al menos de dos kilómetros, es un río de escaso caudal de agua; tanto, que es muy raro haya un verano en que los doce molinos harineros que en él radican dentro del término no queden inservibles por falta de agua en un espacio de dos ó tres meses, suspendiéndose por este tiempo la corriente y formando el agua verdaderos charcos.

Todo el término está dedicado á la producción de cereales, excepto una décima parte al N., destinada á pastos, y algunas pequeñas porciones de terreno en los sitios bajos destinadas también á pastos ó producción de legumbres y hortalizas.

El arbolado es escaso en todo el término; desprovisto de él por completo en casi toda su extensión, sólo conserva como restos de lo mucho que debió de existir en otro tiempo unos pocos centenares de robustas encinas intercaladas con alguno que otro roble en su parte E., N. y NE. y algunas pequeñas alamedas.

Como la parte S. y SO. del término forma la línea divisoria de las cuencas del Yeltes y Camaces, puede comprenderse fácilmente que el terreno en dicho punto tiene que hallarse á una gran elevación, que descendiendo por vertientes no muy acentuadas y formando valles surcados por arroyos de escaso caudal, vuelve á ascender y descender hasta que, en declive más ó menos pronunciado, viene á morir el término en el río.

En uno de esos valles ú hondonadas, el de más extensión y declive más suave de todo el término, en el punto central del cuadrado que éste representa, rodeado de cerros de mediana altura, excepto por su parte N., por la que el valle se prolonga descendiendo suavemente para de pronto precipitarse en el lecho pedregoso y áspero del río, pasado el cual, y en término de Pedro-Alvaro, se levantan cerros de nuevo á bastante altura, se encuentra el pueblo, orientado de S. á N. y formando un cuadrilátero, á cuyo lado mayor del E. se hubiese añadido en su parte central un cuadrado, formado por el barrio del Mocril, orientado de E. á O. y separado del resto del pueblo por la divisoria natural del arroyo de las Tenerías. Debe tener próximamente un kilómetro de extensión de S. á N. y otro tanto de E. á O., incluyendo en esta medida el antedicho barrio del Mocril.

Efecto de la situación apuntada, compréndese claramente que por cualquiera de los caminos que dan acceso al pueblo, la vista no pueda descubrir sus edificios hasta que ya se están casi tocando; y sólo por el N. y desde los cerros de allende el río, á unos tres kilómetros de distancia, se alcancen á ver en perspectiva las casas y edificios de la parte SO., que es la más alta.